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INDICADORES DE DESIGUALDAD Y ESTEREOTIPOS SEXISTAS EN LA JUVENTUD

Madrid, 12 febrero. 15. AmecoPress. Aunque España es sin duda el país europeo en el que mayores avances hacia la igualdad de género se han dado en las últimas décadas, siguen persistiendo entre la adolescencia y juventud española elementos claros de inequ

FAD

Ésta es una de las principales conclusiones extraídas del estudio “Jóvenes y género. El estado de la cuestión”, elaborado por el Centro Reina Sofía sobre Adolescencia y Juventud, un centro privado creado por la FAD (Fundación de Ayuda contra la Drogadicción) gracias al apoyo de Banco Santander y Telefónica. La investigación ha sido presentada por el director general y el director técnico del Centro Reina Sofía sobre Adolescencia y Juventud y de la FAD, Ignacio Calderón y Eusebio Megías.

El estudio analiza, a través de la recopilación de multitud de indicadores, el comportamiento y actitudes de los y las jóvenes españolas según su género con respecto a cuestiones como las relaciones familiares, la sexualidad, la educación, el trabajo, el empleo, los valores o el uso del tiempo libre, entre otros aspectos.

Empleo y tareas domésticas

La diferencia salarial por género es importante en España y ello no solo ocurre entre la población adulta que ha desarrollado ya parte de su carrera laboral y familiar. Entre los hombres y mujeres jóvenes, que tienen niveles de preparación y de experiencia muy similares, también se manifiesta la diferencia salarial. Según el Informe Juventud en España elaborado por el INJUVE en 2012 las mujeres ocupadas de entre 15 y 29 años ganaban, como media, 100 euros menos que los hombres, siendo el salario medio masculino de 889 euros y de 786 euros el femenino.

Para la catedrática de Sociología de la UCM y miembro del Comité Asesor del Centro Reina Sofía sobre Adolescencia y Juventud, Inés Alberdi: “Las cifras globales de empleo de las mujeres jóvenes tienen mucho que ver con los prejuicios y los estereotipos acerca de las tareas de cada sexo en la familia; pero también tienen su explicación en la realidad de esta división desigual de las ocupaciones y las responsabilidades familiares que se les asignan a unos y a otras. Existen en la sociedad española unas diferencias muy marcadas por género en la cuestión de los cuidados familiares”. De hecho, y cita Alberdi, la EPA 2010 reflejaba que es mucho más frecuente en las mujeres que en los hombres jóvenes (63% frente a un 37%) el dejar el empleo o pasar a un trabajo de tiempo parcial por cuidar a algún familiar, ya sean niños, niñas, personas con discapacidad o mayores.

El estudio también recoge otro dato significativo: El 42% de los varones y un 47% de las mujeres de 15 a 29 años creen que tener hijos puede ser un freno para la vida laboral de las mujeres. Pero solo el 23% de los varones y el 11% de las mujeres creen que puede ser un obstáculo para la vida del hombre.

Estereotipos sexistas y violencia de género

El comportamiento sexual de los jóvenes es uno de los aspectos que más ha evolucionado en la sociedad española en las últimas décadas en el sentido de mayor libertad y mayor aceptación social de esa libertad. Los 17 años es, según las encuestas, la edad de la primera relación sexual completa, de una forma similar entre los chicos y las chicas.

La sociedad acepta con naturalidad las relaciones sexuales de los y las jóvenes y podemos decir que se ha disociado la sexualidad del matrimonio y de la maternidad. La mayoría de la juventud no contrae matrimonio hasta los treinta años y, sin embargo, un 81% de ella declara haber tenido relaciones sexuales completas.

Sin embargo, los estereotipos sexistas tradicionales no han desaparecido y podemos advertirlo en formas diferentes de valorar la conducta de unas y de otros en las relaciones de pareja. A pesar de que los comportamientos se han liberalizado enormemente, no han desaparecido del todo las ideas tradicionales que ven de manera distinta la libertad sexual masculina y la femenina. En los estudios cualitativos aparecen formas de hablar que tildan de prostitutas a las jóvenes que tienen relaciones sexuales con diversos chicos y de éxito envidiable la conducta de un joven que tiene relaciones sexuales con varias chicas.

De forma cuantitativa, el 33% de los chicos adolescentes y jóvenes españoles de 12 a 24 años están muy/bastante/algo de acuerdo con la afirmación “Está bien que los chicos salgan con muchas chicas, pero no al revés”. El porcentaje de chicas de esas mismas edades que opina lo mismo no alcanza el 9%.

Para Inés Alberdi: “A pesar de todos los cambios que advertimos en actitudes y comportamientos de las generaciones jóvenes sigue funcionando entre ellos la creencia de que mucha actividad sexual favorece al chico y desvaloriza a la chica. Esta idea tiene elementos de machismo y parece más propia de la sociedad española de hace varias décadas que de la actual”.

También se advierte en el estudio la persistencia de estos estereotipos tradicionales en las respuestas que señalan las cualidades que más aprecian hombres y mujeres en su pareja ideal. La diferencia entre lo que se busca, es decir, lo que más se valora en hombres y mujeres, es muy marcada y ofrece rasgos tradicionales en cuanto presupone capacidades de mando y dirección en el hombre ideal y capacidades de sumisión y abnegación en la mujer preferida, además del atractivo físico.

Para más del 30% de las jóvenes españolas de 12 a 24 años, la principal cualidad de su pareja ideal sería la sinceridad, seguida de la simpatía (19,4%) y la bondad (14,7%). Para los jóvenes de esas mismas edades, las cualidades fundamentales de su pareja ideal serían el atractivo físico (24,4%), la simpatía (21,9) y la sinceridad (19,9)

La justificación de determinados comportamientos machistas, sexistas o violentos, alimenta el germen de la violencia de género. En este sentido, algunas actitudes con las que, muy especialmente los chicos de 12-24 años están “bastante o muy de acuerdo” en proporciones nada despreciables, resultan preocupantes.

Valores

En cuestión de valores, los intereses de unos y otras son parecidos aunque existen algunas diferencias. Todos señalan fuertemente el interés por tener personas en quien confiar, en tener buenas relaciones familiares, en ganar dinero, en el deseo de éxito en el trabajo y en una vida sexual satisfactoria, cosa esta última que señalan algo más los varones.

Las chicas dicen dar mayor importancia a la familia, a la salud y al tiempo libre, mientras que los jóvenes muestran mayor interés por ganar dinero y tener amigos. Los varones manifiestan algo más de interés que las mujeres por la política.

En relación con los valores morales (de justificación de comportamientos) es bien conocida la tolerancia de la sociedad española, jóvenes incluidos, por las conductas incluibles en el ámbito de la moral privada y su mucha mayor rigidez a la hora de sancionar las conductas que agreden el colectivo.

Un rasgo del cambio, que va de acuerdo con las normas actuales, es la aceptación generalizada que tienen los jóvenes respecto de las relaciones homosexuales. Es en las ciudades sobre todo en donde se dan los índices de aceptación mayores y algo más entre las mujeres que entre los varones. Se acepta, de forma general, la existencia de parejas del mismo sexo. Las leyes permiten la convivencia, el matrimonio y la adopción de hijos por parte de estas parejas. Los jóvenes muestran ampliamente una postura favorable ante ello, un poco más las mujeres, y esta diferencia se marca algo más en cuanto a la adopción por parte de parejas homosexuales.

Mujeres, protagonistas del cambio

Según el estudio, España es el país europeo en el que se ha producido un avance más notorio en cuanto a la equidad de género en las últimas décadas. Por encima de cualquier otro de su entorno. Y aunque estos avances han sido protagonizados por la sociedad en su conjunto, se deben en gran parte al avance y evolución de las mujeres. Sin duda, ellas son las grandes protagonistas del cambio.

En opinión de la Catedrática de Sociología de la UCM y miembro de Consejo Asesor del Centro Reina Sofía sobre Adolescencia y Juventud, Inés Alberdi: “Si analizamos los cambios de unos y de otras vemos que son las mujeres las que más han cambiado en casi todos los aspectos. Se han acercado de una forma importante las actitudes y los comportamientos de los jóvenes de uno y otro sexo, fundamentalmente debido a los cambios que han experimentado las mujeres. El cambio por parte de las mujeres ha sido muy grande, ya que los valores de libertad y de autonomía personal se han impuesto y chocan enormemente con el estereotipo femenino tradicional. Hay menos distancia entre los sexos, las mujeres jóvenes han alcanzado una mayor confianza en sí mismas y los hombres jóvenes aceptan unas relaciones más igualitarias con las mujeres”.

Desde una perspectiva de género, la primera característica de esta evolución es el acercamiento en las actitudes y los comportamientos de los varones y las mujeres. Las diferencias de género, en cuanto a las opiniones, actitudes, aspiraciones y proyectos de futuro, de los chicos y de las chicas, siguen existiendo pero, mirándolas en conjunto y con un cierto sentido histórico, podemos decir que no hacen más que reducirse.

Aunque no han desaparecido algunos rasgos estereotipados de la feminidad ya comentados, en general la investigación constata una tendencia clara en la sociedad española hacia una mayor igualdad entre hombres y mujeres, un acercamiento en sus posturas vitales y comportamientos que solo se ve matizada en determinados aspectos como, por ejemplo, la postura ante los riesgos (más marcada en ellos que en ellas); la elección de estudios (ellos apuestan por las carreras más técnicas y ellas en mayor medida por las Humanidades) o en el uso de redes sociales (ellos las utilizan en mayor medida que ellas para ligar, por ejemplo).

En algunos aspectos de ocio y tiempo libre también advertimos matices según el género. Las Encuestas de Uso del Tiempo reflejan una diferencia entre hombres y mujeres: los hombres cuentan con más tiempo libre debido, principalmente, a que ellas dedican más tiempo a cuidados o trabajo no remunerado. Entre los jóvenes ocurre algo similar. Los varones tienen diariamente una hora más de tiempo libre, como media, que las mujeres. La dedicación de este tiempo también es algo diferente, ellas lo dedican más a estudiar y a leer novelas, comics o revistas y ellos más al deporte o a los videojuegos. El tiempo dedicado a la televisión es muy similar entre unos y otras.

 

Fuente: http://www.amecopress.net/